ETAPA 1 DE 2 — ¡NO CIERRES ESTA PÁGINA!

Hola, aquí Esperanza. Felicidades por asegurar tu acceso al Protocolo del Bicarbonato!

Por favor, no cierres ni actualices esta página, ya que eso puede causar errores con tu compra.

Lee este texto súper corto hasta el final, porque tengo un aviso MUY importante para ti.

Tu acceso será enviado por correo electrónico. Recuerda revisar también tu carpeta de spam o correo no deseado.

Si tienes dudas, solo envía un correo y nuestro equipo responderá en menos de 24 horas.

Si estás leyendo este mensaje, es porque tomaste la decisión correcta.

Compraste el Protocolo del Bicarbonato porque quieres tener erecciones más fuertes, duraderas y volver a sentirte un hombre de verdad.

Y eso es exactamente lo que vas a lograr.
Vas a eliminar las toxinas de tu cuerpo que sabotean tu rendimiento y recuperarás firmeza, control y potencia sexual.

Pero déjame preguntarte algo serio…

¿De qué sirve tenerla tan dura como una barra de hierro… si no sabes hacer que tu mujer se venga?

Sí, sé que duele leerlo.

Pero esa es la verdad que nadie se atreve a decirte.

Muchas mujeres incluso entienden cuando un hombre tiene problemas de erección.
Pero ninguna soporta estar con un tipo que no sabe satisfacerla de verdad.

Y cuando eso pasa…

Tú ya sabes lo que viene después:
Chismes, risitas, humillación, vergüenza…

Tu fama te precede.

Te conviertes en “el que la tiene dura… pero inútil”.

Y eso destruye tu autoestima, tu reputación y — muchas veces — tu matrimonio.

Lo sé porque recibo cientos de mensajes de hombres que pasaron exactamente por eso.

Siguieron el protocolo, se pusieron duros como el acero…

Pero aún así, no sabían qué hacer con eso.

Por eso, junto al Dr. Sebastián Larrosa, desarrollamos algo que va más allá de lo físico.

Creamos un programa completo de educación sexual masculina que te transforma en un verdadero experto en el placer femenino.

Te presento ahora:

El Código del Placer Femenino:
El único método avanzado para hacer que cualquier mujer llegue al orgasmo con penetración, sexo oral, dedos — o incluso solo con palabras.

Con este entrenamiento vas a aprender:

✅ Cómo despertar la mente orgásmica de cualquier mujer;

✅ Cómo activar los 5 disparadores secretos de placer que ni ellas mismas saben explicar — pero que TODAS sienten;

✅ Cómo tocar, respirar y moverte para que ella te suplique por más;

✅ Y lo más importante: cómo ser ese hombre inolvidable que ella nunca querrá reemplazar.

Imagina a tu mujer contándole a sus amigas:

“El fulano es el mejor que he tenido… me vine tres veces en una sola noche”.

Eso es lo que están viviendo hoy nuestros alumnos.

Y todo con un método 100% natural, sin cremas raras, juguetes extraños ni locuras.

Y sí, funciona para cualquier hombre, a cualquier edad, sin poner en riesgo la salud.

Este entrenamiento vale mínimo US$150, y yo lo vendería fácilmente por ese precio.

Pero como tú acabas de adquirir el Protocolo del Bicarbonato, quiero recompensarte por confiar en mí.

Por eso, solo aquí, en esta página exclusiva, puedes incluir El Código del Placer Femenino en tu paquete por tan solo:

US$ 57 (Literalmente, menos de R$ 3 por día)

Pero atención: esta oferta es única y exclusiva.

Si cierras esta página, esta condición desaparece para siempre.

Y no sirve que después me escribas diciendo:

“Esperanza, ¿todavía puedo acceder a ese entrenamiento por 57 dólares?”

No. La oferta es AHORA.

Y para que estés tranquilo, pongo mi palabra en juego:
Estás cubierto por una garantía incondicional de 30 días.

Si crees que no aprendiste nada o que no valió la pena,
solo pide el reembolso. Te devolvemos cada centavo.

Piénsalo conmigo…

Ya vas a resolver tu problema de erección con el Protocolo del Bicarbonato.

Ahora solo falta saber qué hacer con ese fierro duro.

El Código del Placer Femenino te va a transformar en ese hombre que hace a la mujer venirse, gritar, temblar, sudar… y pedir más.

Todo lo que tienes que hacer es hacer clic en el botón verde aquí abajo y agregar este entrenamiento a tu paquete.

Créeme:
Después de ti, ella no va a querer a ningún otro hombre.